miércoles, 23 de marzo de 2016

El amor más allá de los cincuenta.


Joven, no tengo nada que envidiarte... el amor a los 50 es más dulce, más sereno... ahora sé muy bien lo que quiero y lo que no.
En el último cartucho apuntaré bien. Tengo fijado hace tiempo el objetivo de la vida. El disparo preparado tantos años no fallará. Pero si me equivoco lo haré a gusto, el fracaso será dulce.

Amor  mío: no te puedo dar mediodías, pero sí atardeceres, el pavo real se quedó en real hace muchos años. Te puedo dar abrazos lentos, besos como brisas, caricias delicadas. Escucharemos música de los 80 con la boca torcida,  con la voz arrastrada: Nena, ¿qué quieres bailar?, Tengo los viejos LP. Pongamos las 33 revoluciones: los surcos están rallados, pero suenan cálidos; cambiaremos el rock por el viejo acordeón,  caeremos enamorados de la moda senior...Tomaremos un triple seco, dejaremos las burbujas. Pondremos el dial en las frecuencias bajas, en los tonos graves...

Igual me gusta la luna, lo mismo prefiero la lluvia, quizás prefiera decirte: no te desnudes todavía...


2 comentarios:

  1. Estaba romántico... en el pub actuaba en directo un mínimo grupo de músicos interpretando en vivo canciones de los ochenta... Reviví mi juventud y la traje treinta años más acá. Todo sonaba más cálido y yo escuchaba sonidos nuevos. Entonces escribí en el móvil algunas frases... después vino esta entrada.

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  2. Estaba romántico... en el pub actuaba en directo un mínimo grupo de músicos interpretando en vivo canciones de los ochenta... Reviví mi juventud y la traje treinta años más acá. Todo sonaba más cálido y yo escuchaba sonidos nuevos. Entonces escribí en el móvil algunas frases... después vino esta entrada.

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